España

Derriban, por orden judicial, la primera chabola del asentamiento gitano de Penamoa

La familia denuncia que no se les ofreció ayuda y el Ayuntamiento lo niega 

A Coruña - EP - 03/03/2011

Una excavadora ha procedido este martes a la demolición de la primera chabola del asentamiento gitano de Penamoa, en la ciudad de A Coruña, derribada por una orden judicial, a instancias del requerimiento del Ayuntamiento coruñés ante la negativa de sus ocupantes, un matrimonio con un niño, a abandonarla. Durante el derribo, no se produjeron incidentes, aunque sí hubo insultos y gritos por parte de los familiares de los afectados, que denunciaron que no se les ofreció ayuda, algo que niega el Ayuntamiento.

Bajo un amplio despliegue policial, integrado por efectivos de la Policía Nacional y la Local, y con presencia de representantes del juzgado que ordenó el derribo y del Ayuntamiento de A Coruña, se produjo, después de las 10.30 horas, la demolición de la chabola, tras permitir a sus ocupantes quitar los enseres que había en ella, así como otros materiales, entre ellos numerosas ruedas.

Durante el derribo, que concluyó poco después de las 11.00 horas, algunos familiares de los afectados profirieron gritos e insultos contra la concejala de Servicios Sociales, Silvia Longueira, presente en el lugar y contra la amplia presencia policial.

Mientras que el matrimonio, que se encontraba con su hijo, guardó silencio, otros allegados mostraban su indignación ante el derribo, que congregó a numerosos medios de comunicación, aunque a pocos gitanos ya que la mayoría se han acogido al plan de erradicación del chabolismo impulsado por el Ayuntamiento de A Coruña y que se ha puesto en marcha coincidiendo con la ejecución de las obras de la Tercera Ronda, que pasa por estaba asentamiento.

Reacción de la familia

El patriarca de la familia, Manuel Rivero, ha reclamado al Ayuntamiento de A Coruña "ayuda" para que el matrimonio y su hijo "no queden tirados y sin refugio" y ha denunciado que a los gitanos se les niega el alquiler de pisos. "Nos dicen, por un lado, que convivamos con los payos, pero luego no nos alquilan", ha argumentado.

Por su parte, Santiago Rivero al que, a través del plan de erradicación del chabolismo los servicios municipales ofrecieron la compra de una vivienda, ha reconocido que su hermano "es toxicómano y está enganchado", pero ha pedido que "le ayuden".

En la misma línea, se ha pronunciado otro de sus hermanos, que ha argumentado que los servicios sociales municipales no le ofrecieron esta ayuda, al tiempo que ha negado, entre insultos a la concejala coruñesa, que a su hermano no le permitiesen acogerse al plan por tener antecedentes.

Respuesta municipal

Mientras, la concejala de Servicios Sociales, Silvia Longueira, ha manifestado que "todos" los residentes de Penamoa han tenido "a su disposición" el equipo de erradicación del chabolismo. "Se les ha informado de todas las ayudas y derechos", ha insistido la edil, quien ha evitado hablar del caso concreto de esta familia.

"No puedo, ni debo dar datos de su vida", ha añadido Longueira, quien ha precisado, al ser preguntada sobre el número de personas que vivían en la chabola, que "empadronadas" estaban el matrimonio y su hijo, y ha puesto en duda que no tengan un lugar donde vivir ahora.

"Tienen una familia extensísima", ha replicado ante las preguntas sobre la situación en la que queda al niño, al tiempo que ha recordado que el menor "tiene unos padres" y que las competencias, en último caso, son de la Xunta en esta materia.

Longueira ha lamentado también la presencia del menor durante la demolición de la chabola, pero ha incidido en que con el plan de erradicación de chabolismo —al que se han adherido 79 familias— "se ha conseguido que más de 200 niños ya no vayan a pasar el resto de su vida aquí como lo hicieron sus padres". "Sólo por eso vale la pena", ha apostillado. Ahora, quedan pendientes de derribo por orden judicial otras 19 chabolas.

Fuente: 20 Minutos

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